En los libros de fábrica de las diferentes iglesias que llegaron a existir en Villalpando hay noticias de conocidos plateros del siglo XVI cuyas obras no han llegado hasta nuestros días. Sin embargo, en la cercana población de Castroverde de Campos se conservan una cruz de plata con punzón de Juan Magarzo y un cáliz de Antonio Borrego que presenta la particularidad de ser el único conocido por ahora en la producción de este platero leonés.